
El documento surge en el marco de los Food Dialogues de la Comisión Europea y busca visibilizar el papel de los gobiernos locales en la garantía del derecho a una alimentación saludable y sostenible. CALMAR promueve este diálogo para incidir en el debate europeo y generar propuestas concretas desde la escala municipal, reconociendo que los ayuntamientos tienen competencias clave para transformar los sistemas alimentarios.
Situación en la Comunidad de Madrid
La región presenta un bajo consumo de alimentos ecológicos, una producción local insuficiente (solo el 18% de los alimentos tienen origen provincial) y una alta dependencia externa. A ello se suma que el 19,4% de la población se encuentra en riesgo de pobreza o exclusión social, dificultando el acceso a alimentos saludables. La agricultura familiar, pese a su importancia, enfrenta dificultades para sostenerse frente al modelo agroindustrial dominante.
Propuestas y recursos municipales
El informe plantea fortalecer la producción local mediante el acceso a la tierra, centros de acopio y distribución, viveros de emprendimiento agroecológico y bonificaciones fiscales para la producción ecológica. También se propone crear espacios comunitarios de cultura alimentaria y apoyo a iniciativas de economía social que promuevan autonomía, solidaridad y redes vecinales. Los ayuntamientos pueden desempeñar un papel central articulando políticas de cercanía y fomentando circuitos cortos de comercialización.
Compra pública y experiencias de referencia
La compra pública alimentaria se presenta como una herramienta estratégica para transformar el sistema alimentario desde lo local. Incluir criterios ecológicos, sociales y de proximidad en los contratos municipales puede mejorar la salud pública, reducir el impacto ambiental y apoyar al tejido productivo local. Experiencias de Viena, Copenhague y París muestran que es posible combinar sostenibilidad, equidad y calidad alimentaria, inspirando a municipios como Madrid a avanzar hacia modelos más justos y resilientes.

